Hace unos cuantos días me encontré con una compañera de trabajo que hace muchos años no veía, así que intercambiamos e-mails y, para variar, el primer envío que recibí de su parte es este "forward" de un chiste que comparto con ustedes:
Pepito jugaba con su tren en miniatura en la sala de su casa, mientras su mamá cocinaba y lo miraba de vez en cuando.juar juar sí, ya pueden reirse. Gracias.
Luego de varias vueltas, el tren llega a la Terminal y Pepito, actuando como el inspector del tren dice:
¡Estación Terminaaaaal!
¡Todos los hijos de su chingada madre que viajan hasta aquí agarren todas sus chingaderas y se bajan en chinga del tren, bola de pendejos; y los culeros que viajan devuelta, suban rapidito sus pinches y putas maletas, antes que los agarre a chingadazos!!
Al oir esto, su madre -espantada- salió rápidamente de la cocina y le dice a Pepito:
¡Pero qué vocabulario es ese, hijo! ¡Deja inmediatamente tu tren y te me vas a tu recámara! ¡Quedas castigado por DOS horas!
Luego de las dos horas de castigo, le levantan el castigo y Pepito vuelve a jugar con su tren y esta vez dice:
iEstación terminaaaaaaaal!,
Los pasajeros deben descender. A nombre de nuestra empresa les agradecemos haber viajado con nosotros, prefiriendo nuestra hospitalidad y servicio. Por favor bajen sus pertenencias y ante cualquier necesidad,por favor soliciten la ayuda de nuestros asistentes. Y a quienes viajan de vuelta, por favor tengan la bondad de subir al tren con su equipaje y acomodarse en sus respectivos asientos, que ya vamos a partir.
Su madre, con una sonrisa en los labios, ya más tranquila, continua cocinando, pero inmediatamente después, Pepito agrega:
Y si algún cabrón hijo de su chingada madre está emputado por las 2 horas de retraso que tenemos, que se pare y le reclame a la pinche vieja que está en la cocina!!
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